jueves, 19 de junio de 2008

Carta abierta a la comunidad parlamentaria

Señores legisladores. Señores funcionarios parlamentarios.

De mi mayor consideración,

Hoy les toca interpretar el movimiento presto agitato. La orquesta se debe preparar para sonar brillante, ardiente, con profusión de timbres, de registros, de dinámica, y llegar así a un imponente final bien allá arriba que nos deje sin aliento antes de que explote el aplauso. Tal vez después puedan volver al andante, al tono menor. Pero sabiendo que están preparados para todo.
El foyer se está llenando de público impaciente. La sala la tienen que tener bien preparada, todo arregladito y limpito para recibirlo. No puede quedar nadie afuera. Es más, deberían chequear si alguno de los asistentes es intérprete para ver si podría aportar algo a su versión de la obra.
Si lo pensamos bien, la que van a tocar en sí misma no es de las que quedan en la historia. Pero las circunstancias hacen que esta interpretación en particular sí. Depende de ustedes. Hoy, señores legisladores, son puestos en el medio de la escena política y mediática, con lo que cuentan con una oportunidad excepcional de hacer ver si y cuánto es importante su tarea.

["Proyecto blindado" o "proyecto trampa", entre otras cosas, son los poco amables calificativos que recibió la iniciativa del Poder Ejecutivo sobre la cuestión de las retenciones. Es que fue de una torpeza descomunal que el Jefe de Gabinete, entre otros, hiciera público su deseo de que el voto en el Congreso sólo se limitara al sí o al no a la ratificación del esquema completo armado trabajosamente en estos cien días.]

Lo primero que tienen que tener en cuenta que los congresos son "casas de vidrio" en las que todo se ve y es público, tal vez hoy más que nunca. No permitan que ninguna traba burocrática dificulte el acceso de aquel público impaciente a sus debates y discusiones, tanto en las comisiones como en el recinto. Es verdad, su casa, señores diputados, o mejor dicho, sus comisiones, están poco preparadas para esto. Sus salas de reuniones no tienen una platea desde donde seguir el intercambio de opiniones, por ejemplo. Apenas si hay lugar para ustedes, los diputados, y sus asesores. Por esto, es que deben prever la mayor difusión de sus reuniones, y buscar el ámbito adecuado para una masiva concurrencia. Tal vez puedan recurrir a las audiencias públicas (previstas en el artículo 114 bis del Reglamento de la HCD).

Cada uno de ustedes debe ensayar muy bien su parte. El concertino podrá ser el centro de las miradas y al que le toca tomar gran parte de las decisiones, pero no sería nada sin los demás, incluso sin el asistente que prepara los atriles. Todos saben que suman algo, y esta es la oportunidad de que quede bien claro.

Hicieron bien en adelantar para el lunes a las 17:30 el primer ensayo sobre el tema que les toca interpretar. No permitan que nada los distraiga. Aunque la sala de ensayo es bastante grande, aun así va a ser incómoda. Pero su tarea es más importante. Y aunque el producto final pueda tener relevancia, el procedimiento que vayan a utilizar es vital porque es más que posible que su ejecución no sea del gusto de todos, pero si son capaces de mostrar en qué lo sustentan, escuchando todas las sugerencias, su decisión será intachable.

Luego de la función nos podremos dedicar cada uno a lo nuestro. Que no otra cosa queremos. Y ustedes podrán recordar la frase del Quijote: "A quien da todo lo que tiene, no se le puede pedir más".

No defrauden.

Los saludo con toda cordialidad.

3 comentarios:

Ni buena ni mala... dijo...

despues de una semana de "conciertos" que opinion le merece el desarrollo de los mismos. Para mi gusto un tanto, por no decir mucho, desprolijos.

Anónimo dijo...

no se de que trata pero igual te quiero mucho y respeto tu "opinion"

Unknown dijo...

Ni buena ni mala: las reuniones fueron caóticas, sí. Posiblemente mucho tenga que ver lo poco apropiado de las instalaciones para este tipo de reuniones, que despiertan tanto interés.
Mucho se especuló sobre que respondían a una táctica dilatoria. Puede ser. Ninguno de los bloques tuvo oportunidad de "contar los porotos" antes de comenzar el tratamiento del proyecto. Sin embargo, al final de la semana también se dijo que la ronda de consultas efectuada hizo que varios diputados del oficialismo comiencen a dudar sobre su voto. Por lo que, si de especular se trata, se podría pensar que fue una táctica de los presidentes de ambas comisiones, que son de Córdoba y de Santa Fe, para introducir esa duda.
Por otro lado, se reclamaba mucho el diálogo, el escuchar, el informarse. ¿En qué otro ámbito parlamentario se puede hacer eso si no es en el de las comisiones? Si hubiera ido directamente al recinto, sólo hubiera habido discursos de los diputados.
El tratamiento de este proyecto está yendo por carriles muy diferentes de los habituales. Lo más importante que está faltando es el tratamiento técnico y entre los técnicos. Hay muchos aspectos a tener en cuenta, y son tantas las posibilidades que se barajan que es imprescindible alguna consideración de este tipo.
En fin, caótico y desprolijo, pero, en ese marco, los diputados, ¿tenían muchas más opciones?
Muchas gracias por su interés y el comentario.